Comunismo y Catolicismo ¿Ideas compatibles? Pio XI.

Desde los inicios de la ideología comunista esta ha dejado bien clara su postura respecto a la religión calificada por sus precursores como, “El Opio del Pueblo”, unas de las principales piedras del zapato de lo que ellos llamaron el progreso del género humano; acusaban a la religión y en especial el cristianismo de mantener una sociedad sumida en la ignorancia, y plagada de teorías obsoletas que no tendrían cabida en un mundo moderno. Rápidamente la teoría fue llevada a la práctica y se persiguió la religión en los nuevos estados comunistas, llevando a cabo encarcelamientos, destrucciones y ejecuciones a la comunidad cristiana. Para lograrlo, se prohibieron sus símbolos y festividades, se pusieron en duda sus principios y se trató de refutar sus ideas. Afortunadamente ha pasado algún tiempo desde que ocurrieran estos hechos que pueden ser plenamente juzgados hoy por la Historia, pero los hechos han demostrado que los objetivos de la internacional comunistas de destruir la iglesia continuan y han sido solo los métodos los que han cambiado.
Recientemente esta casa ha hecho una investigación relativa a la infiltración comunista en la iglesia recopilando datos y testimonios históricos.
En este artículo continuamos desmontando el mito de los que hoy convenientemente dicen ser católicos y comunistas ¿Qué dice la iglesia al respecto? ¿Puede ser esto posible? Analicemos lo que dice la iglesia católica a través de Los Pontífices León XIII y Pío XI.
Doctrina Social Pontificia:
Resumen de la Carta Encíclica “Divini Redemptoris” sobre el comunismo ateo. (Pío XI)
El Papa Pío XI atribuye el origen del comunismo al pecado original, la lucha entre el bien y el mal y las maquinaciones constantes del diablo haciendo falsas promesas. Afirma que la barbarie que genera el comunismo en contra de la iglesia es tan salvaje como la que casi 2000 años atrás emplearan los pueblos civilizados en contra del cristianismo primitivo.
En materia social Pío XI expresa que: El comunismo Bolchevique y ateo tiende a derrumbar el orden social y socavar los fundamentos de la sociedad cristiana. Pío XI hace referencia en Divini Redemptoris que su predecesor León XII hace una condena previa al comunismo en la encíclica papal “Quod Apostolici numeris” donde la definía como: “Mortal pestilencia que se infiltra por las articulaciones más íntimas de la sociedad Humana y la pone en peligro de muerte”.
En 1924 cuando la misión vaticana de socorro volvía de la Unión Soviética. Pío XI se declaraba en guerra contra el comunismo en alusiones especiales al mundo entero. Además de elevar protestas en las encíclicas Miserintissimus Redemptor, Quadragesimo Anno, Caritates Christi, Acerba animi y Dialectissima Nobis. En Donde expone las persecuciones en México, Rusia y España.
Doctrina del Comunismo Definida por Pío XI en Divini Redemptoris:
Aquí el Pontífice nos ofrece un interesante concepto de la ideología comunista definiéndolo como:
“Una falsa idea de redención, un pseudoideal de justicia, de igualdad y de fraternidad en el trabajo que penetra toda su doctrina, el comunismo de un mundo en el que se ha hecho una terriblemente defectuosa distribución de riquezas generando una miseria casi desconocida y aprovechándose de ese dicho pseudoideal crea una ilusión de cierto progreso económico. Lo cual crea la percepción debido a la utilización de métodos bien distintos como La intensificación de la producción industrial en países que carecía de ella, valiéndose de enormes riquezas naturales y utilizando métodos inhumanos para efectuar grandes trabajos con pocos gastos”
Pío XI
En la misma carta encíclica el sumo pontífice continua con grandes criticas al materialismo evolucionista planteado por Marx, y afirma que el comunismo despoja al hombre de su libertad y principio espiritual de su conducta moral, quita toda dignidad a la persona humana y todo freno moral contra lo que él llama “El asalto a los estímulos ciegos” Continúa diciendo que al no reconocer al individuo propiedad sobre los bienes naturales o medios de producción rompe con el orden natural del pensamiento humano creando un caos económico y social.
Pio XI habla también que al negar lo divino establece el matrimonio como algo totalmente artificial y vacío negando su indisolubilidad, además de desvincular a la mujer de la familia, descuidando la educación y crianza de los hijos negando por consiguiente a los padres la educación y crianza de los hijos puesto que considera este derecho exclusivo de su “sociedad” considerando los niños como propiedad estatal. Esta sociedad que plantea sería una sociedad basada en la colectivización sin más jerarquía que el propio sistema económico con la única misión de producir bienes por el trabajo colectivo y como fin el goce de los bienes de la tierra en un prototipo de “paraíso terrenal” en el cual darían según sus fuerzas y recibirían según sus necesidades y para esto obliga a la sociedad al trabajo colectivo con violencia, sin atender sus necesidades y en contra de su voluntad.
Conclusión de Pío XI sobre la doctrina del comunismo en Dinini Redemptoris:
En propias palabras Pío XI expresa:
“He aquí, venerables hermanos, el nuevo presunto evangelio, que el comunismo bolchevique y ateo anuncia a la humanidad como mensaje de salud y redención: Un sistema lleno de errores que contradice la razón y la ley divina, subversivo del orden social, porque equivale a la destrucción de sus bases fundamentales, desconocidas del verdadero origen de la naturaleza, y del fin del estado, negador de los derechos de la persona humana de su libertad y dignidad.”
Pío XI
Promesas deslumbradoras:
Aquí el pontífice explica la rápida expansión del comunismo, afirmando que es debido a que muy pocos han podido penetrar en su verdadera naturaleza, además de que es muy fácil caer en la tentación de tan deslumbradoras promesas. Este reconoce que, aunque sus fines son legítimos, (Mejoras en la suerte de la clase trabajadora, eliminación abusos reales de la economía liberal, obtener un a retribución más justa y otras importantes promesas) este carece de métodos funcionales, reales y viables. El comunismo se aprovecha de esta parte real exponiendo con crudeza las injusticias del capitalismo y haciendo uso de un sensacionalismo brutal, lo que hace que el pontífice lo califique como repugnante e inhumano y que se vale de utilizar jóvenes con inteligencia poco preparada aún para darse cuenta de sus errores intrínsecos incentivando odio y violencia señalando con importancia que Los pregones de esta ideología saben también aprovecharse de los antagonismos de la de raza, de las divisiones y u oposiciones de diversos sistemas políticos y hasta de la orientación del campo de la ciencia sin Dios para infiltrarse en las Universidades y corroborar con argumentos pseudo-científicos de los principios de su doctrina.
El Liberalismo preparó el camino al comunismo
El papa Pío XI afirma también en su carta encíclica que fue el liberalismo quien preparó el camino al ideario comunista, diciendo que fue la secularización liberal y el abandono religioso y moral de la economía liberal lo que hizo que el comunismo se encontrara el terreno preparado, critica también los turnos de trabajo los domingos y los días festivos y que no se pensaba en construir iglesias frente a las fábricas además de estimular el laicismo, haciendo que la gente tuviera en menos la iglesia.
Afirma también que esta ideología se valió de una “Astuta propaganda Diabólica” elaborada para países grandes y pequeños, cultos e incultos y esto fue hecho desde organizaciones grandes e internacionales, congresos, innumerables fuerzas y medios de comunicación
Consecuencias dolorosas “Rusia, México y España”
Aquí Pio XI Concluye denunciando la situación de los cristianos de la época en México, España Y Rusia diciendo que obispos y sacerdotes fueron condenados, apresados, fusilados, desterrados, forzados a trabajos, y asesinados de forma inhumana lamentándose también por la muerte de cristianos, jóvenes y todos los ciudadanos en general, aunque afirma que estas situaciones serían un fenómeno transitorio y que con el paso del tiempo la ideología comunista colapsaría por su propia ineficiencia. Expresa: “Si se arranca del corazón a los hombres la idea de Dios, sus pasiones lo empujarán necesariamente a la barbarie más feroz”
Y Concluye diciendo que, a pesar de todo, el comunismo no podrá hacer logros en el campo económico y que aún en el campo económico necesitamos la moral y el sentimiento de responsabilidad, que en sustitución de ese sentimiento no queda más que Terrorismo.
En Resumen del Autor:
Aunque recién comenzaban a difundirse las ideas comunistas por el mundo, Pío XI nos ofrece un análisis detallado en su carta encíclica Divini Redemptoris con una exactitud y una predicción muy acertada y confiable desde un punto de vista cristiano, social, político y económico.
El Papa 259 de la iglesia católica nos da una muy buena descripción de la ideología comunista dejando también muy clara la postura de la iglesia con respecto a esta ideología llegando a afirmar que catolicismo y comunismo son dos conceptos que no pueden ir juntos al ser conceptos opuestos que se niegan el uno al otro. Pío XI fue un enemigo acérrimo de las ideologías totalitarias de la época ya que también es conocido por su enemistad con el nazismo exponiendo sus diferencias en la encíclica “Mit brennender Sorge”. Durante su pontificado, Pío XI fortaleció la Iglesia católica como institución y comenzó a ser un referente importante a nivel mundial no solamente en los aspectos religiosos sino también políticos. Además de ser conocido también por ser el primer jefe de estado de la Ciudad del Vaticano.