El amor de Sánchez por las narco-dictaduras comunistas americanas

Con la visita de Pedro Sánchez a Colombia tras la reciente llegada al poder del comunista Gustavo Petro, Sánchez continua demostrando su amor por las narcodictaduras comunistas de américa latina, siendo esta la primera parada de su gira se convierte también en el primer presidente fuera del continente en visitar a Petro.

Esta no es la primera vez que Sánchez se enorgullece de sus buenas relaciones con los sectores más radicales de la izquierda latinoamericana y así lo demuestra su visita a La Habana en noviembre de 2018 donde se reunió con el dictador comunista Miguel Diaz Canel, una de las figuras más impopulares a nivel mundial, o su visita en agosto de ese mismo año en la que el criminal Evo Moraleslo lo condecoró con la máxima orden del estado boliviano llamándolo “El hermano presidente” también Sánchez le ha tendido la mano al peronismo visitando a Alberto Fernandez (donde actalmente su vicepresidenta Kristina Fernandez está siendo procesada por el mayor caso de corrupción del país) en 2021 y hasta con el impresentable de López Obrador en México, y en este viaje el presi también sumará otra narcodictadura comunista de recién estreno cuando visite a Xiomara Castro en Honduras al final de su gira según lo planificado.

Antonio hace de las suyas en Colombia, ofrece España como sede de negociaciones entre comunistas colombianos y terroristas de la guerrilla, evita llamar dictador a Maduro y le da la risa al conviertirse por un momento en el presidente de la Républica Española.

Las andanzas de Antonio no se hicieron esperar desde que tocó tierra colombiana, quién por cierto llegaba luciendo una de sus corbatas despues de recomendar su desuso según el responsables de la crisis energética en España, horas después ofrecía bajo el cuadro de Bolívar a España como remplazo a La Habana para las polémicas negociaciones entre terroristas de la guerrilla colombiana y los comunistas del gobierno.

Semanas atrás, Petro y Maduro anunciaban el nombramiento de embajadores en sus respectivos países en una primera señal de acercamiento político. a lo que Sánchez respondió que “España se siente cómodo en esta nueva relación de diálogo con Venezuela”

Lo que quedó en evidencia este miércoles en la entrevista que concedió al medio colombiano W Radio (del Grupo Prisa). En la que evitó responder 2 veces al periodista que le hizo el reportaje sobre si cree que Maduro es un dictador.

Tras la reunión llegó la rueda de prensa de los mandatarios donde Antonio reaccionó con una evidente risa tras la aparente confusión de la presentadora que lo anunciaba como “Presidente de la República Espanola” a lo que Sánchez ni se molestó en rectificar, al contrario más quisera él.

Por mucho que Sánchez trate de vestirse de demócrata aunque últimamente ni se molesta y el diario El País haga sus mejores esfuerzos en diferenciarlo de Zapatero y sus socios comunistas de podemos, no para de mostrar su verdadera cara amiga de régimenes totalitarios como se vió con el escándalo del Delci Gate en el aeropuerto de barajas y de Jugar a los dos bandos destruyendo la ya sentida política exterior española.