La Vara de Gandalf – EmpanadillaGate

Hace unas semanas nos indignamos con el empanadilla Borja gate, donde un imbécil de unos treinta y pico se grababa mientras abusaba de una dependienta haciéndole pasar a ésta un mal rato. Grabación que luego subía a YouTube, y así, aprovechando el morbo de la atracción del horror, conseguir visualizaciones de una manera tan fácil como abyecta.
Por supuesto no es el primero, hace un tiempo salieron otros vídeo donde unas celadoras muy jóvenes se burlaban del anciano al que “cuidaban“. Salen vídeos parecidos con demasiada frecuencia, y no todos son por conseguir visualizaciones y cobrar una monetización, algunos por simple diversión.
Muchos que se indignan con estas asquerosidades nunca critican, por ejemplo, que en las escuelas los chavales no se levanten cuando entra el director o hablen de tú al profesor, ya no hablemos de escuchar de pie y respetuosamente el himno nacional al inicio y fin de curso. Tampoco critican que se estén apartando las humanidades para fomentar las materias técnicas y así ser más productivos y competitivos (aunque la muchos ingenieros acaben de camareros, o emigrando a otros países donde se les valora más su formación), dejando apartadas la filosofía y la historia. O que directamente la historia que dejen sea tergiversada para sus revanchas ideológicas, o que se den cursos para aprender a hacer felaciones como toca, pero eso sí, todo en plan guay y en un ambiente de colegueo.
Siempre que critico que se están perdiendo los valores en Occidente siento que estoy haciendo de abuelo cebolleta otra vez. Otro discurso, otro sermón, como si fuera un predicador (creo que esto ya lo he dicho anteriormente en otros escritos ).
Ya sé que durante toda la historia, las generaciones actuales siempre han creído que las nuevas generaciones eran más insubordinadas e irrespetuosas, contando que siempre ha habido un pequeño tanto por ciento irrecuperable. Sin embargo, también veo que es la primera vez en toda la historia, que vemos como uno se lo piensa dos veces a la hora de regañar al crío de otro cuando comete alguna canallada, y aquí está la clave amigos. Hay como un reparo social muy extendido a no meterse en jardines ajenos. Una vocecita que te dice: “Pepe, no te metas en problemas que puedes salir mal parado, tú a lo tuyo”. Aunque también es verdad que sólo tengo tres referentes generacionales: el de mis abuelos, el de mis padres y el mío. Vamos, que no sé qué pasaba en la Edad Media respecto a este tema, pero me lo puedo imaginar.
Está muy bien que al tal Borja le hayan cerrado su canal de YouTube, pero creo que el meollo del asunto es que se sintiera tan tranquilo durante tanto tiempo para grabar y publicar esos vídeos. Que viera que el estado general de la situación actual le permitía hacerlo y sacarse un dinerito, que viendo el entorno social no le pareciera una idea inviable.
Hay un dicho de los indios norteamericanos que parece una frase de Paulo Coelho que dice así: Para educar a un niño hace falta toda la tribu. ¿A que es bonita? Seguro que muchos de vosotros la conocíais.
¿Qué queremos? ¿empleados productivos que sólo busquen el beneficio inmediato con el jiji jaja como música de fondo? ¿Seguir devaluando la educación y fomentando la tontería sin que se devalúe la educación y prospere la tontería?
¡Más mano dura! No, no es necesario, mejor mano justa. La mano justa también es dura con quien se lo merece. Ser bueno o duro es tan fácil como destructivo, lo difícil es ser justo, pero siempre es mejor. Si ves que el río crece, pero no has levantado ningún dique para contenerlo, no te extrañe que luego se desborde.
¡Qué tiempos aquellos en los que en vez de asquearnos con el empanadilla Borja gate, nos reíamos de las empanadillas de Móstoles.
Buenos días.