¿Aporta algo bueno el socialismo?

Nada. Nunca. Jamás. De ninguna manera. Es un oxímoron. Una quimera. Pretender conciliar el socialismo con algo bueno, es chocarte contra un muro de hormigón. ¿Dudas? Mira a Cuba, Venezuela, Nicaragua, Perú, Chile, Colombia, Argentina. ¿Sigo? Algunos eran los países más ricos del mundo, las reservas alimenticias, el paraíso en la tierra… Hasta que llegó el socialismo y acabó con todo. ¡Ojo! Es el camino que llevamos en España.

Estimado lector, el título de la columna es el tuit que publiqué hace dos días. ¿Por qué lo preguntas? ¿Buscas provocar? La duda ofende… Estas y otras cuestiones me plantearon varias personas que se mostraban iracundas. Desconozco el porqué. A todos he contestado amablemente, salvo a aquellos “botantes” izquierdosos que pasaron al insulto y a la amenaza; todos fueron mandados a pastar al campo y bloqueados ipso facto.

Nunca discutas con un estúpido. Te hará descender de nivel y ahí te ganará por experiencia” (Mark Twain).

Una pregunta, ¿qué cojones tiene que pasar para que de una puñetera vez la gente abra los ojos? “Botantes” rojos, te están sodomizando y, lejos de quejarte y evitarlo, pides perdón por dar la espalda.

Entonces, ¿Qué aporta el socialismo? Ignorancia, pobreza, miseria, hambre, rencor, corrupción, envidia, resentimiento, delincuencia, barbarie, conflictos sociales y mucho odio: lo que vimos ayer en la Universidad de Granada, y antes en Vallecas, en Cádiz, en Barcelona, en Bilbao, en Pontevedra, sin que el Gobierno mueva un dedo para atajar de raíz este grave problema. Estamos a un paso de lamentar una desgracia. Llegados a ese punto, ya será muy tarde.

Lo diré muy claro: Urge poner a disposición judicial a los fascistas disfrazados de antifascistas, previo abastecimiento de una generosa dosis de jarabe de palos. Justo lo contrario de lo que se vio ayer en Granada, fascistas (qué feos y sucios son) impidiendo ejercer su derecho constitucional a doña Macarena Olona. Esto aporta el socialismo.

Si fuesen antifascistas de verdad, deberían ir contra ellos mismos.

¿Qué fue de las falsas pintadas en Asturias, el “bulo del culo”, los ataques racistas, la navajita manchada de sangre y “socialistamente” aumentada para parecer el machete con el que el asesino comunista, valga la redundancia, “Che” Guevara asesinaba a negros y homosexuales o las balas enviadas. Esto aporta el socialismo. ¿No se parece mucho al falso atentado contra CFK?

Bulo de la Navaja con gotas de pintura roja

Para finalizar, dejo por escrito mi opinión: todo mi desprecio por el socialismo. Por si hubiere alguna duda (me río mientras redacto esto), insisto, todo mi desprecio.

El socialismo es esa enfermedad que pretende dar soluciones del siglo XIX a problemas del siglo XXI. ¿Alguien se imagina extrapolarlo al ámbito de la economía, la empresa, la medicina, las comunicaciones, las nuevas tecnologías? Sería un absoluto fracaso, justo lo que es el socialismo.

P.S. ¿Ha condenado la izquierda el fascismo de sus cachorros -aspirantes a Otegi- contra Macarena Olona?

Macarena Olona en Granada
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Miguel de Farnesio

Escritor y articulista. Libros ;“España Renace”, “Víctimas del Socialismo”

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